2º A Y 2º B: CLASE DEL 29 DE MAYO DE 2020
¡Buenos días!
Vamos a continuar elaborando el álbum de fotos que comenzamos la semana pasada. Vamos a continuar por orden cronológico analizando los cambios de mentalidad que hubo en el comienzo de la Edad Moderna y que empezamos a analizar el pasado miércoles.
EL NACIMIENTO DEL MUNDO MODERNO
- La invención de la imprenta:
El otro día estudiamos la aparición del Humanismo, una corriente ideológica y de pensamiento que se difundió por toda Europa durante el siglo XV. Uno de los medios que permitió su rápida difusión y expansión fue la imprenta.
La imprenta fue un invento que combinaba la tipografía con el uso de una prensa, papel y tinta. Este nuevo método permitió elaborar muchos más ejemplares de un libro en menos tiempo y a un coste menor, eliminando además muchos de los errores que podían cometer los copistas. El primer libro impreso fue la Biblia en dos tomos que Gutemberg (inventor de la imprenta) elaboró en Alemania en 1455.
- La Reforma y la Contrarreforma:
Entre las nuevas ideas que se difundieron durante el siglo XV estuvo la urgente necesidad de reformar la Iglesia como institución. Hacia el final de la Edad Media, hubo un gran malestar en la sociedad por algunas actitudes llevadas a cabo por la Iglesia como:
- El lujo que rodeaba a la alta jerarquía eclesiástica. Muchos papas, obispos, arzobispos, abades,... vivían en una situación de completo lujo, como la alta nobleza. Esto fue criticado por ciertos sectores porque Cristo había predicado la austeridad y por el mal ejemplo que daban al resto de la sociedad.
- La escasa cultura y la relajación de las costumbres del clero. Esto fue especialmente notable en el bajo clero, donde los sectores más humildes, como monjas, párrocos o curas no sabían ni leer ni escribir y vivían en una situación de extrema pobreza que chocaba con el alto clero. También había algunos clérigos que no cumplían con sus votos, como el de pobreza o castidad.
- La compraventa de cargos eclesiásticos: en muchos casos, los cargos eclesiásticos eran dados a dedo por pertenecer a una familia determinada o ser cercanos a los monarcas.
- La venta de bulas o indulgencias: a cambio de dinero, la Iglesia vendía "perdones". Por ejemplo, algunas familias compraron bulas para no tener que hacer el ayuno y la abstinencia durante la Cuaresma.
Todo ello, provocó que varias voces se levantaran contra la Iglesia durante los siglos XV y XVI. Uno de los grandes iniciadores de este movimiento fue Erasmo de Rótterdam (abajo en la imagen), un intelectual humanista que defendió el librepensamiento y la necesidad de la educación y la tolerancia. Uno de sus principios fue que la auténtica actitud religiosa se hallaba en el interior del alma y no en las pomposas ceremonias religiosas.
Este movimiento se fue expandiendo, siendo denominado Reforma, porque quería cambiar y reformar la Iglesia católica. El momento de mayor tensión llegó en 1517, cuando Martín Lutero, un fraile alemán publicó una lista con 95 tesis contra la doctrina católica y la jerarquía eclesiástica. Martín Lutero consideraba que la religión debía de cambiar en los siguientes elementos:
1. La salvación por la fe: solo la fe en Dios debía permitir la salvación eterna.
2. La autoridad de la Biblia: no era necesaria la interpretación de las lecturas por los sacerdotes, sino que cada creyente tiene el derecho a interpretar la Biblia como mejor considere.
3. El sacerdocio universal: todos los bautizados tienen derecho a ser sacerdotes, por lo que pueden existir pastores que contraigan matrimonio y trabajar para obtener sus ingresos.
4. La negación de la autoridad del Papa: eliminando las órdenes religiosas, desapareciendo el culto a las imágenes y reduciendo los sacramentos solo al bautismo y la eucaristía.
Aquí tenéis una imagen de las 95 tesis de Lutero:
Esto supuso una ruptura de la Iglesia católica, ya que muchos países, como Alemania, apoyaron las ideas de Lutero, apareciendo así los movimientos reformistas y protestantes. Todos ellos creen en Cristo, pero no siguen las directrices de la Iglesia Católica.
Además de Lutero, aparecieron otros movimientos rupturistas con la Iglesia, como fue el Calvinismo. Este movimiento se inició en Suiza, con Juan Calvino, y se basa en la predestinación. Esto significa que Dios ya tiene fijado un destino para cada persona, sin importar lo que hagas en vida, por lo que ya, desde tu nacimiento, vas a ser condenado o salvado. También defiende que el trabajo dignifica al ser humano y que el éxito en los negocios es dado por Dios. Debajo tenéis a Juan Calvino:
Finalmente, otro movimiento rupturista que tuvo lugar en 1534, fue en Inglaterra de la mano del rey Enrique VIII. Este rey estaba casado con Catalina de Aragón (hija de los Reyes Católicos), con la que tan solo había tenido una hija (María). No quería seguir casado con ella y solicitó el divorcio, pero éste no era contemplado por la Iglesia. Por ello, decidió romper relaciones con la Iglesia católica y se proclamó como jefe supremo de la Iglesia de Inglaterra. A esto se le conoce como el anglicanismo que, de hecho, sigue existiendo hoy día y su cabeza visible es la reina Isabel II de Inglaterra.
La respuesta no se hizo esperar, y ésta ha sido conocida en la historia como la Contrarreforma católica. Fue un intento de la Iglesia católica por frenar la expansión del protestantismo. Para ello, el papa Pablo III convocó un Concilio en Trento, que tuvo lugar entre 1545 y 1563. En estas reuniones, se trataron de corregir los errores de la Iglesia y se establecieron los dogmas y ritos de obligado cumplimiento para los católicos.
Para difundir las ideas del Concilio de Trento, surgieron numerosas órdenes religiosas, como la Compañía de Jesús, fundada en el siglo XVI por san Ignacio de Loyola.
Junto a ellas, el papa creó la Congregación del Santo Oficio o Inquisición Romana, siendo un tribunal eclesiástico que perseguía y castigaba a todos aquellos que no seguían las directrices católicas. En el caso de España, fue el último país en establecer este Tribunal, pero también el último en hacerlo desaparecer (perduró hasta el siglo XIX). La Inquisición hacía una especie de juicio que se llamaba auto de fe, donde los condenados debían negar públicamente de sus creencias para volver a la Iglesia. En caso de que se negaran a dejar la herejía, serían condenados a alguna pena, como arder en la hoguera. Ha habido muchos autores y libros que han hablado sobre la Inquisición, como Edgar Allan Poe o el libro de Miguel Delibes, El Hereje:
Igualmente, se creó una lista de libros prohibidos por la Iglesia católica por considerar que atentaban contra las creencias religiosas cristianas. Esta lista era conocida como la Congregación del Índice.
A pesar de ello, los países se dividieron a favor y en contra de la Reforma y la Contrarreforma. Inglaterra, Alemania, Dinamarca,... son países que se van a poner del lado de la Reforma y, en muchos casos, se separaron de la Iglesia católica. En cambio, otros como España o Francia se convirtieron en los grandes defensores de la Iglesia y del papa. Esto dio lugar a numerosos enfrentamientos religiosos que perduraron hasta el siglo XVII.