1º B: CLASE DEL 27 DE MAYO DE 2020

¡Buenos días!
El lunes estuvimos viendo los aspectos de la religión egipcia. Vimos que se trata de una religión politeísta, donde existían numerosos dioses basados en los fenómenos que veían en la naturaleza y que eran mitad hombre y mitad animal por lo general. 

Hoy nos vamos a centrar en otro aspecto de suma importancia en las creencias egipcias: las creencias funerarias. Vamos a ver hoy las páginas 186, 187, 190 y 191 de vuestro libro de texto. 

LAS CREENCIAS FUNERARIAS

Los egipcios creían que el ser humano estaban formados por dos elementos: el cuerpo y el alma (llamada ka). Una vez que una persona fallecía, el alma accedía a una vida de ultratumba que dirigía el dios Osiris. 

Todas las normas para poder acceder a esa vida del más allá estaban escritas y detalladas en el Libro de los Muertos. En él se detallaba cómo acceder a esa vida en el más allá y qué ocurría. Vamos a verlo: 

- En primer lugar, el cuerpo del difunto debía permanecer incorrupto, perfectamente conservado. Por ello se recurría a la momificación. En la momificación, algunos órganos del fallecido eran extraídos (como el cerebro y las vísceras), los cuales se metían en unos vasos que se llamaban vasos canopes. Estos vasos tenían forma de animal en la tapadera. El interior del difunto se rellenaba entonces con serrín y aceites, dejándose durante dos meses para que el cuerpo se impregnara. Una vez asegurada la conservación del cuerpo, se cubría con vendas. 

- Después, la momia era metida en un sarcófago, un ataúd que tenía forma humana y estaba decorada, añadiendo un ejemplar del Libro de los Muertos. 

- El sarcófago era entonces llevado a la tumba. Las tumbas de Egipto evolucionaron muchísimo a lo largo de la historia de esta civilización. Los faraones, sacerdotes, escribas... todas las personas de gran importancia en la sociedad egipcia, eran enterrados en grandes tumbas que, al principio, fueron mastabas. Las mastabas eran tumbas rectangulares hechas de adobe y que, mediante un pasillo, se accedía a una cámara subterránea donde era enterrado el difunto: 

Posteriormente, aparecieron las pirámides, que eran construcciones de grandes dimensiones que servían como morada eterna a los faraones. En ella, se guardaba la momia y su ajuar. Para impedir su robo y saqueo, la entrada estaba escondida y en el interior de la pirámide se construían galerías que conducían a falsas cámaras funerarias. 

Las pirámides, además, tenían esta forma porque el sol se ilumina en la parte superior. La última de las construcciones funerarias que se hicieron en Egipto fueron los hipogeos. Y es que, los saqueos y los robos eran muy frecuentes, por lo que comenzaron a construirse grandes cámaras funerarias ocultas bajo tierra y muy decoradas con pinturas. La más conocida está en el Valle de los Reyes, cerca de Tebas, como fue la tumba de Tutankamón que fue encontrada en 1922: 

- Ya una vez enterrado en su tumba, el fallecido comenzaba el Juicio de Osiris. En él, se colocaba el corazón del difunto en un lado de una balanza y la pluma de la diosa Maat en la otra. Se simbolizaba así a un lado a la justicia y, al otro, al alma del difunto. Si el alma estaba libre de culpas porque la persona había sido buena durante su vida, el corazón pesaba menos que la pluma y el difunto accedía a la vida eterna. En el caso contrario, que el corazón pesara más que la pluma por los pecados y malas obras cometidas, el corazón era devorado por el monstruo Ammit y no podía acceder a la vida eterna. 

A continuación, realiza la siguiente visita virtual a esta tumba y anota en tu cuaderno qué elementos de los que hemos estudiado encuentras: https://my.matterport.com/show/?m=vLYoS66CWpk